Revisar la RAM en Windows 11 no es tan complicado, pero es una de esas cosas que se esconden si no sabes dónde buscar. A veces, tu PC se siente lento, o quizás estás intentando averiguar si vale la pena actualizarlo, y solo necesitas un vistazo rápido a la RAM instalada y en uso. Hacerlo regularmente puede ayudar a prevenir ralentizaciones y a comprender mejor el funcionamiento interno. Por suerte, Windows 11 ofrece un par de formas sencillas de revisar las especificaciones de la memoria, ya sea usando el Administrador de Tareas o la herramienta Información del Sistema. Es bastante útil, especialmente si estás solucionando problemas o simplemente tienes curiosidad por el hardware.
Cómo comprobar la RAM en Windows 11
Esta sección explica los métodos más sencillos para ver tu RAM porque, sinceramente, ¿quién quiere complicarse con la BIOS o un software que parezca demasiado complejo? El objetivo es obtener información rápida y fiable sin complicaciones. Ya sea que estés solucionando problemas con un equipo lento, planeando una actualización o simplemente tengas curiosidad por tu hardware, estos consejos te serán útiles.
Método 1: usar el Administrador de tareas, la forma rápida y sencilla
Esta es la ruta más común. Suele funcionar sin necesidad de software adicional ni de revisar la configuración. Permite ver el uso de memoria y la RAM total en tiempo real sin complicaciones. Ideal para comprobaciones ocasionales o para la monitorización continua.
- Pulsa Ctrl + Shift + Escpara abrir el Administrador de tareas. Si no funciona, también puedes hacer clic derecho en el menú Inicio y seleccionar Administrador de tareas.
- Accede a la pestaña Rendimiento en la parte superior. A veces está oculta tras el menú de hamburguesa, pero la mayoría de las veces está a un solo clic.
- Haz clic en Memoria en la barra lateral izquierda. Si no está visible, asegúrate de estar en la pestaña Rendimiento; a veces está minimizada o simplemente no está seleccionada.
Aquí verás un gráfico del uso de tu RAM, además de detalles como la memoria total instalada, la velocidad y las ranuras utilizadas. En algunas configuraciones, el Administrador de Tareas podría no mostrar la información más detallada, pero es suficiente para tener una idea aproximada.
Método 2: Profundice con la herramienta de información del sistema
Para obtener detalles más específicos, como el número de modelo exacto, la memoria física total o si desea confirmar las especificaciones del hardware, la Información del Sistema es su mejor opción. Está un poco escondida, pero una vez que la encuentra, vale la pena.
- Presione Windows Key + Rpara abrir el cuadro de diálogo Ejecutar. Escriba
msinfo32
y presione Enter. - Espera un momento mientras carga. Busca en la lista la memoria física instalada (RAM). Esto te mostrará la RAM total instalada en GB, junto con otra información de hardware.
Este método es especialmente útil si el Administrador de tareas no proporciona suficiente información o si desea verificar las especificaciones del hardware al actualizar o solucionar problemas. A veces, Windows muestra estadísticas incorrectas, por lo que conviene comparar ambos métodos.
Consejos adicionales: Preste atención al uso y las actualizaciones
Al revisar tu RAM, observa cuánta se usa realmente: si se acerca al 100 % regularmente, podría ser una señal para considerar una actualización. Es normal que la RAM fluctúe según lo que estés haciendo, pero si los procesos en segundo plano consumen mucha, quizás sea necesario limpiarla.
Consejo profesional: usa el Administrador de tareas para desactivar aplicaciones de inicio innecesarias o procesos en segundo plano que podrían estar consumiendo RAM. Además, considera usar herramientas de terceros como MemTest86 o utilidades especializadas si sospechas que hay fallos de hardware; claro, Windows a veces tiene que complicar las cosas más de lo necesario.
Ah, y si estás pensando en ampliar tu RAM, revisa bien las especificaciones de tu dispositivo, especialmente la memoria máxima admitida y la configuración de ranuras. Un vistazo rápido al manual de tu portátil o placa base, o usar una herramienta como CPU-Z, puede ahorrarte muchos problemas.
Y si usas una laptop con RAM ampliable, ten en cuenta que muchas ultrabooks o dispositivos slim pueden soldar la RAM a la placa base, lo que imposibilita la actualización. Siempre es una grata sorpresa, ¿verdad?
Bueno, eso es prácticamente todo. Revisar la RAM en Windows 11 es sencillo una vez que sabes dónde buscar, pero un consejo es monitorizarla periódicamente; elementos como el malware o los programas en segundo plano pueden aumentar el uso de memoria de forma inesperada. Y si planeas actualizar, asegúrate de que tu sistema admita más RAM y luego instala módulos compatibles. No siempre es perfecto, pero es mejor que intentar adivinar por qué tu PC se ralentiza.