Ver las velocidades de tu disco en Windows — Sinceramente, es más fácil de lo que crees
Si alguna vez te ha picado la curiosidad sobre qué tan rápido es tu SSD, disco externo o memoria USB, seguro te has dado cuenta de que no siempre es sencillo averiguarlo. He perdido bastante tiempo intentando hacer pruebas simples sin tener que recurrir inmediatamente a programas complicados y pesados. Y, resulta que Windows tiene algunas opciones integradas, que están algo ocultas o al menos no son tan evidentes al principio. Una vez que sabes dónde buscar, no es tan complicado — aunque tampoco es perfecto.
Usando comandos nativos de Windows para evaluar el rendimiento del disco
Esto es lo que finalmente me funcionó a mí: usar la línea de comandos — en concreto, Windows Terminal o PowerShell. No es la herramienta más bonita para hacer benchmarks, pero está integrada en Windows y es rápida. Básicamente, abres el terminal con permisos de administrador, ejecutas un comando y obtienes una estimación de tus velocidades de lectura y escritura secuencial del disco.
Antes de empezar, asegúrate de que tus discos externos estén conectados a un puerto decente (USB 3.0, USB-C, lo que sea). A veces, aunque el disco esté conectado, funciona a menor velocidad porque está en un puerto de menor rendimiento — como USB 2.0 antiguo o un puerto compartido del motherboard. Conéctalo en el puerto correcto y asegúrate de que esté bien montado antes de hacer la prueba.
Preparando el terminal
Necesitarás permisos de administrador. Para ello, pulsa Windows + X y se abrirá un menú rápido. Allí, selecciona “Windows Terminal (Administrador)” o “Símbolo del sistema (Administrador)”, según aparezca. Si no ves PowerShell en las opciones, tal vez debas actualizar Windows o ajustar alguna configuración, pero generalmente aparece sin problemas.
Ya te lo digo por experiencia: he tenido que hacer esto varias veces, sobre todo en sistemas un poco viejos. A veces, en el menú solo aparecen las opciones estándar. En equipos muy antiguos o con configuraciones OEM muy cerradas (como algunos Asus o Dell), puede ser necesario desactivar ciertas restricciones en el BIOS o activar el “modo heredado” — pero eso ya es otra historia.
Ejecutando la prueba de velocidad con winsat
Aquí es donde empecé a quedarme atascado: qué comando usar exactamente. La clave es winsat disk -seq -drive <letra de la unidad>
. Sustituye <letra de la unidad> por la letra correspondiente, como D: o E:. Por ejemplo, para probar la unidad D, ejecuta:
winsat disk -seq -drive D
Este comando inicia una prueba rápida de las velocidades secuenciales de lectura y escritura. La herramienta de evaluación del sistema de Windows (winsat) estima estas velocidades en MB/s. La salida puede parecer un poco confusa al principio, pero la información esencial está allí. Normalmente, verás los datos en MB/segundo, y así puedes saber si tu disco está funcionando dentro de lo esperado o si, en cambio, va mucho más lento de lo normal.
Un consejo: ten paciencia. El comando no tarda mucho, pero en hardware antiguo o en sistemas con mucha actividad puede demorarse un poco en completarse. Además, recuerda que usar -seq realiza una prueba de rendimiento secuencial. Si quieres una idea del rendimiento en accesos aleatorios (como en uso cotidiano), tal vez debas buscar otras herramientas, ya que winsat solo hace estimaciones básicas.
Discos externos y resolución de problemas
Para probar un disco externo, basta con conectarlo antes de abrir la terminal y ejecutar el comando. Asegúrate de que esté montado correctamente. También, revisa en el Explorador de archivos qué letra tiene asignada; a veces, no es la que esperas, especialmente con tarjetas SD o múltiples unidades conectadas. Al principio, intentaba hacer la prueba con la unidad equivocada por error, porque me fijaba en la letra incorrecta.
Me tomó unos intentos dar con la correcta, porque, francamente, la sintaxis es un poco estricta. Asegúrate de incluir el parámetro -drive
y no olvides ejecutar como administrador, o el comando puede no hacer nada o devolver un error. Si los resultados parecen inconsistentes, reiniciar puede ayudar a limpiar alguna información en caché o estados temporales.
Más allá de winsat — Para pruebas más detalladas
Recuerda que winsat
es un método rápido y sencillo. Es útil para tener una idea general, pero si necesitas analizar el rendimiento para solucionar problemas o obtener datos precisos (como velocidad en accesos aleatorios 4K, profundidad de cola, etc.), lo mejor es usar herramientas dedicadas. CrystalDiskMark, ATTO Disk Benchmark o AS SSD Benchmark te ofrecen información mucho más detallada y diferentes escenarios de prueba.
De todas formas, en un apuro, este método integrado cumple bastante bien. Además, así evitas tener que instalar programas adicionales solo para una prueba básica.
Consejos y advertencias
Un consejo rápido: a veces, los resultados de velocidad pueden estar falseados por procesos en segundo plano, antivirus realizando escaneos, indexación o incluso encriptación del disco. Por ejemplo, una gran actualización de Windows en segundo plano puede alterar las cifras. También considera que la versión del firmware del disco, la carga del sistema o la fragmentación pueden influir en los resultados.
Si los números parecen extraños o inconsistentes, prueba a reiniciar, cerrar aplicaciones en segundo plano y asegurar que el disco no esté en proceso de indexación o uso activo en ese momento.
Reflexiones finales — ¿Por qué vale la pena esto?
Sinceramente, saber a grosso modo cómo se comporta tu disco sin instalar software adicional está bien. Además, es rápido y no tienes que esperar a que se descarguen programas. Para una revisión rápida, el comando winsat
funciona bastante bien si lo ejecutas con permisos de administrador y cambias la letra de unidad correspondiente.
Eso sí, hay que tener en cuenta que no es perfecto. Solo da velocidades secuenciales y los resultados pueden variar según la carga del sistema o el estado del disco. Pero es suficiente para una prueba rápida antes de meterse en benchmark más exhaustivos.
Espero que esto te haya sido útil — me llevó mucho tiempo descubrirlo, así que compartirlo puede ahorrar horas a alguien más. ¡Y ahora, a seguir probando tus discos!