Gestionar la medición de la frecuencia cardíaca en el Apple Watch a veces puede parecer un juego de azar. No es raro ver lecturas lentas o, peor aún, resultados erróneos durante los entrenamientos o incluso en controles casuales. Es un poco extraño, pero el sistema integrado a veces no es suficiente, especialmente si intentas registrar un entrenamiento o simplemente obtener una lectura rápida antes de salir. Resulta que hay un truco bastante simple que podría hacer que esto sea mucho más consistente: usar la corona del reloj para acelerar el proceso y obtener resultados más precisos. No se necesitan aplicaciones de terceros, solo una solución alternativa que aprovecha los electrodos de la propia corona. Esto es lo que ha funcionado en la práctica. La idea es dar al sensor más señales tocando la corona con un dedo, lo que parece ayudarle a medir las señales eléctricas del cuerpo de forma más fiable y rápida. No sé por qué funciona, pero en algunas configuraciones, ese contacto adicional realmente acelera el proceso y podría hacer que las lecturas sean más fiables. Ten en cuenta que es un truco, no oficial, pero si el método habitual se retrasa o da resultados extraños, vale la pena intentarlo. Veamos cómo hacerlo.
Cómo obtener la frecuencia cardíaca de forma rápida y precisa desde tu Apple Watch
Método: Uso de la corona para lecturas más rápidas de la frecuencia cardíaca
- Por qué ayuda: Tocar la corona con el dedo proporciona un punto de contacto adicional que ayuda al sensor a captar más señales eléctricas, lo que permite lecturas más rápidas y precisas. Es como darle al sensor más «oídos» para escuchar los latidos del corazón.
- Cuándo se aplica: Si tus lecturas habituales de frecuencia cardíaca son lentas, inconsistentes o tardan mucho en actualizarse, este pequeño truco podría ayudarte. Es especialmente útil durante los entrenamientos o las revisiones rápidas cuando quieres obtener resultados rápidamente.
- Qué esperar: La pantalla debería actualizarse más rápido y con mayor precisión. Verás tu frecuencia cardíaca aproximadamente cada segundo, en lugar de los 5 segundos o más habituales. En algunos relojes, el cambio se nota al instante, gracias al contacto adicional con los electrodos.
Antes de empezar, asegúrate de que los sensores de tu reloj estén limpios; a veces, la suciedad puede afectar las lecturas. Además, no esperes milagros siempre, pero este truco ha sido útil en muchos casos donde las mediciones regulares parecían lentas o imprecisas. Ten en cuenta que, en algunas configuraciones, puede que no sea muy efectivo, y a veces el reloj simplemente funciona por sí solo. Pero bueno, es bastante fácil de probar sin tener que modificar la configuración ni descargar nada raro.
Cómo hacerlo:
- Ponte el Apple Watch cómodamente en la muñeca. No demasiado apretado, solo lo suficiente para que no se deslice, pero lo suficientemente ajustado para que esté en contacto con la piel.
- Abra la aplicación Frecuencia cardíaca desde el menú principal: busque el ícono del corazón rojo y tóquelo.
- Espera a que aparezcan el logotipo del corazón y el interruptor de medición. Probablemente tardará uno o dos segundos, sobre todo si tu reloj no ha estado en uso.
- Coloque un dedo de la otra mano sobre la corona (sí, esa pequeña esfera, no el botón lateral ni la carátula).Aplique una presión suave, pero no tan incómoda.
- Mantenga el dedo sobre la corona durante todo el tiempo de medición. Manténgalo firme y no lo toque, ya que la calidad de la señal podría ser deficiente.
- Observa la pantalla. En lugar de las actualizaciones lentas habituales, tu frecuencia cardíaca debería empezar a mostrarse con más frecuencia. Puede parecer un poco extraño que tocar la corona ayude, pero parece mejorar el contacto y las señales de los electrodos, al menos en algunos casos.
Por experiencia, este método a veces funciona a la primera, otras veces requiere varios intentos. Es un poco impredecible, pero cuando funciona, los resultados son más rápidos y estables que usar solo el reloj. Además, no está de más intentarlo si estás cansado de esperar o de obtener resultados extraños.
Y sí, puede que esto no sea perfecto para todas las situaciones, pero es un truco genial para tener a mano. Imagínatelo como si le dieras a tu Apple Watch un «oído» extra para escuchar tu ritmo cardíaco; a veces, solo necesita un pequeño empujón para leer mejor.