Instalar Windows 8.1 desde una memoria USB puede ser revolucionario, especialmente si estás cansado de las configuraciones lentas o de lidiar con los problemas de las actualizaciones de Windows. Es sorprendentemente sencillo si sigues los pasos correctos, pero el problema es que manipular la BIOS o crear una unidad de arranque puede ser un problema si no lo haces bien. Esta guía cubre los aspectos esenciales, como crear una memoria USB de arranque con Rufus, configurar la BIOS para que arranque desde USB y seguir todas las instrucciones para instalar Windows 8.1 correctamente. Al final, tendrás una instalación nueva, que posiblemente agilice el proceso o solucione problemas complejos. Recuerda: haz una copia de seguridad de tus datos primero, porque, por supuesto, Windows a veces lo complica más de lo necesario.
Cómo solucionar la instalación de Windows 8.1 desde USB de forma más fiable
Usar Rufus para crear un USB de arranque (Método 1)
Dado que confiar en las herramientas integradas de Windows a veces puede provocar unidades de arranque incompletas o dañadas, un método más fiable es descargar Rufus. Es gratuito, muy ligero y suele funcionar donde otros fallan. Simplemente descarga tu ISO de Windows 8.1 (del sitio web de Microsoft u otras fuentes fiables) e introduce una memoria USB vacía (de al menos 4 GB, según el tamaño de la ISO).Inicia Rufus, selecciona tu dispositivo USB, elige la ISO de Windows 8.1 en «Selección de arranque», deja la configuración predeterminada y pulsa «Iniciar».
Esto convierte tu USB en un instalador de arranque. Es un poco raro, pero he visto que las propias herramientas de Windows lo estropean a veces, sobre todo si hay problemas al formatear el USB. Rufus suele ser muy eficaz, y una vez hecho, puedes continuar con tranquilidad.
Ajustar la prioridad de arranque en el BIOS (Método 2)
Los sistemas pueden ser un poco quisquillosos en este aspecto. Para arrancar desde el USB, debes acceder a la BIOS e indicarle al equipo que cargue primero desde el USB. Normalmente, reinicias y pulsas F2, F10, Supr o Esc justo después de encenderlo; depende de tu placa base o del fabricante original. Una vez dentro, ve al menú de Arranque o al Orden de Arranque. A veces se llama Secuencia de Arranque, otras veces es solo una lista. Arrastra el dispositivo USB o muévelo al principio de la lista. Si ves tu unidad USB en la lista, selecciónala específicamente si es necesario. Guarda los cambios y sal (normalmente pulsa F10).Si tu BIOS tiene modo UEFI, comprueba si el Arranque Seguro está desactivado, ya que puede bloquear los cargadores de arranque que no sean de Windows.
En algunas configuraciones, esto falla la primera vez, pero luego funciona tras reiniciar o restablecer la BIOS. Es cuestión de prueba y error, pero no te desanimes.
Arrancar desde USB y ejecutar la instalación de Windows (método 3)
Una vez configurada la BIOS, reinicie el sistema. Debería iniciarse directamente en el entorno de configuración de Windows 8.1. Si no es así, verifique que la memoria USB esté formateada correctamente y que el Arranque seguro (si está activo) no la esté bloqueando. Es posible que deba volver a la BIOS y activar el Arranque seguro o el Arranque heredado, según su configuración.
Verá el logotipo de Windows y las opciones de configuración, ya conocidos. A veces, se necesitan varios intentos para configurar el orden de arranque correctamente, especialmente en portátiles con opciones de arranque rápido o firmware propietario. Pero una vez que llegue a este paso, verá las opciones de idioma, que también le permitirán comprobar que su teclado y preferencias regionales sean correctos.
Siga las instrucciones de instalación de Windows (método 4)
Aquí es donde el proceso empieza a ser más real. Selecciona tu idioma, zona horaria y distribución del teclado. Introduce tu clave de producto si la tienes a mano; a veces Windows la solicitará más tarde, pero es mejor tenerla a mano. Cuando te pregunten por el tipo de instalación, elige » Personalizada: Instalar solo Windows», a menos que estés reinstalando una versión existente y quieras conservar los archivos (no se recomienda sin copias de seguridad).
Selecciona la unidad donde debería ir Windows. Si estás haciendo una instalación desde cero, es mejor borrar las particiones antiguas para empezar de cero (ten cuidado; revisa bien qué unidad estás formateando).El instalador copiará los archivos, lo cual puede tardar un rato, una buena oportunidad para picar algo. No te preocupes si tu PC se reinicia varias veces; es normal.
Configuración completa y acabado (método 5)
Tras copiar y reiniciar, Windows te pedirá que personalices la configuración, crees una cuenta de usuario y ajustes las opciones de privacidad. Si has desconectado todo lo innecesario, este paso debería funcionar sin problemas. Una vez hecho esto, te encontrarás con un escritorio nuevo, posiblemente más rápido y limpio que antes. Al menos, eso es lo que esperamos.
Consejos para hacerlo más fácil
- Asegúrate de que tu unidad USB esté completamente vacía antes de crear el archivo de arranque. Los datos sobrantes pueden causar problemas.
- Hacer una copia de seguridad de sus archivos de antemano es una obviedad: las instalaciones de Windows tienden a borrar todo el contenido del disco.
- Asegúrese de que su PC cumpla con los requisitos mínimos de Windows 8.1 : no todas las máquinas antiguas están a la altura de la tarea.
- Mantenga su clave de producto a mano: podría necesitarla durante la configuración.
- Actualice su BIOS si es antiguo; a veces los problemas de compatibilidad causan dolores de cabeza durante el arranque o la instalación.
Preguntas frecuentes
¿Puedo instalar Windows 8.1 en cualquier computadora?
La mayoría sí, pero debes comprobar si el hardware cumple con las especificaciones. Sobre todo si se trata de hardware muy antiguo o poco común, podría no funcionar correctamente.
¿Realmente necesito una clave de producto?
Sí. Windows 8.1 lo solicitará durante la instalación, a menos que lo estés reinstalando en una máquina ya activada.
¿Qué pasa si no puedo arrancar desde mi USB?
Verifique nuevamente el orden de arranque del BIOS, asegúrese de que el Arranque seguro esté deshabilitado si es necesario y verifique que su USB se haya creado correctamente con Rufus o similar.
¿Es posible conservar mis archivos o tengo que borrar todo?
Puede elegir actualizar o conservar los archivos durante la instalación, pero es más seguro hacer una copia de seguridad primero porque las cosas pueden salir mal, especialmente si la unidad tiene problemas.
¿Qué pasa si se corta la energía durante la instalación?
Lo más probable es que tengas que reiniciar desde cero. La estabilidad de la alimentación es crucial durante la instalación; no lo hagas con la batería agotada ni durante una tormenta.
Resumen
- Crea un USB de arranque con Rufus
- Configure su BIOS para que arranque desde USB primero
- Arranque desde el USB y ejecute la configuración de Windows
- Siga las instrucciones para instalar Windows 8.1
Resumen
Instalar Windows 8.1 en una máquina desde una memoria USB no es tarea fácil, pero requiere atención al detalle. Una vez que la BIOS y los dispositivos de arranque estén listos, la instalación es muy sencilla. Este método es bastante fiable y, con un poco de paciencia, la mayoría de la gente puede hacerlo sin mayores complicaciones. Con suerte, esto le ahorrará algunas horas a alguien o incluso ayudará a reparar una PC que no funciona bien.