Usando Progressive Web Apps para Acceder a Gmail en Windows
Si alguna vez quisiste una experiencia más parecida a una aplicación para Gmail en Windows pero te frustraba la falta de una app oficial de escritorio, no estás solo. Yo también pasé por eso. Existe una solución usando las Progressive Web Apps (PWAs), que son básicamente páginas web que simulan bastante bien el apariencia y funcionamiento de un programa nativo. Es un truco un poco artesanal y no oficial, pero, la verdad, una vez configurado, funciona de manera muy fluida. Me costó un poquito de prueba y error dejarlo bien, así que aquí comparto lo que finalmente me funcionó de forma confiable.
Abrir Gmail en Chrome
Primero, abre Google Chrome. No, otros navegadores como Edge o Firefox no soportan tan bien las funciones para crear PWAs—al menos no de forma tan sencilla y fluida como Chrome. Accede a https://mail.google.com y entra con tu cuenta. Espera a que se cargue completamente tu bandeja. Este paso básico es clave: si Gmail no carga del todo antes de crear el acceso directo, puede que luego te quede una ventana en blanco o algo raro. Vale la pena esperar unos segundos extras para que todo esté listo.
Crear un acceso directo para Gmail
Cuando Gmail ya se vea bien en Chrome, haz clic en el icono de los tres puntos en la esquina superior derecha (el menú de Chrome). Pasa el cursor sobre ‘Más herramientas’—eso está un poco escondido—y luego selecciona ‘Crear acceso directo…’. Dependiendo de tu versión de Chrome, puede que diga solo ‘Crear acceso directo’. Cuando aparezca la ventana emergente, ponle un nombre, por ejemplo ‘Gmail’. Importante: marca la casilla que dice ‘Abrir como ventana’. Así, Gmail se abrirá en su propia ventana, separada de Chrome, sin barras de direcciones ni pestañas, y se verá casi como una app nativa. Da click en ‘Crear’ y… listo. Por lo general, el acceso directo aparece en el escritorio en unos segundos, pero algunas veces tuve que refrescar o hacer doble clic varias veces para que apareciera.
Anclar Gmail en la barra de tareas
Haz doble clic en ese nuevo acceso directo para asegurarte de que abre Gmail en una ventana independiente. Si todo funciona bien, clic derecho en su icono en la barra de tareas y selecciona ‘Anclar a la barra de tareas’. Así tendrás acceso rápido cada vez que lo necesites. Aunque no transforma Gmail en una app nativa puramente, sí le da un acabado mucho más limpio que una pestaña fija o una ventana de navegador normal. Además, al estar en una ventana propia, te facilita el mantener el foco y cambiar entre aplicaciones sin problemas.
¿Por qué funciona esto?
Este truco aprovecha que Chrome soporta las PWAs—que son servicios web empaquetados para funcionar más como aplicaciones. Son livianas, no requieren una ventana completa de navegador y se pueden fijar, abrir o incluso aparecer en tu lista de apps. Es una solución intermedia muy práctica: mejor que tener una pestaña abierta constantemente y con Chrome desordenado, pero sin complicarte instalando una app aparte. Tener esa ventana dedicada te ayuda a reducir distracciones y a acceder a Gmail más rápido cuando lo necesitas. Aunque Chrome todavía corre en segundo plano, la diferencia en la comodidad vale mucho la pena.
Consejos finales
Ten en cuenta que este método no es perfecto. Las actualizaciones de Chrome o de Windows a veces pueden romper el acceso directo, o quizás tengas que borrarlo y crear uno nuevo de vez en cuando. Limpiar la caché o volver a configurar el acceso directo suele solucionar la mayoría de los problemas si Gmail deja de abrirse correctamente. Además, presta atención a la casilla ‘Abrir como ventana’ en esa ventana que aparece al crear el acceso directo; a veces es una opción pequeñísima en ese diálogo. Si usas otros navegadores, como Edge, el proceso es similar, pero los nombres de los menús y pasos cambian. En Edge, por ejemplo, irías a Configuración > Aplicaciones > Instalar este sitio como una aplicación, que hace algo parecido.
En mi experiencia, esto funciona mucho mejor que solo poner Gmail en una pestaña fija, porque realmente se abre como una ventana aparte—no solo una pestaña más del navegador—lo que le da un aire mucho más parecido a una app independiente. Sí, es un truco un poco casero, pero funciona muy bien una vez que lo configuras.
Espero que esto te haya ayudado—me costó bastante probar para dejarlo bien, y sería genial que Google ofreciera una solución oficial, pero mientras tanto, este método funciona de lujo. ¡Ojalá sirva para ahorrarles un fin de semana de frustraciones!