Cambiar a Windows en una Mac puede parecer un poco intimidante al principio, pero sinceramente, no es tan complicado, sobre todo si solo usas Boot Camp. Claro que las Mac no están diseñadas para configuraciones de arranque dual, y el proceso puede ser un poco engorroso, con algunos pasos que parecen sencillos pero tienen sus peculiaridades. Si alguna vez te has preguntado: «¿Puedo instalar Windows sin dañar mi Mac?», así es como se suele hacer. Lo importante es asegurarte de que tu Mac sea compatible, tenga suficiente espacio y que tengas la ISO de Windows correcta. Una vez configurada, te sorprenderá lo fácil que es cambiar de una versión a otra. Es práctico para jugar, probar cosas o ejecutar aplicaciones exclusivas de Windows cuando sea necesario. Un aviso: prepárate para tener que reiniciar el sistema y quizás lidiar con controladores si las cosas se comportan de forma extraña después de la instalación. Pero con paciencia, es totalmente factible.
Cómo cambiar a Windows en Mac — Real Talk
Este es el tipo de proceso que has visto en línea, pero a veces los pequeños detalles te confunden. Aquí, se trata de asegurarte de que todo encaje correctamente con tu configuración; de lo contrario, te quedarás atascado o te quedarás sin nada. Al final, podrás cambiar entre macOS y Windows al iniciar, lo cual es genial si necesitas esa aplicación exclusiva de Windows o simplemente quieres ver a qué viene todo este revuelo.
Asegúrese de que su Mac esté lista: verifique los requisitos y los archivos
- Primero, asegúrate de que tu Mac no sea tan antigua que no sea compatible con Windows. Comprueba qué modelo tienes: no tiene sentido intentar instalar Windows en una MacBook Air de 2012 que ya tiene problemas con macOS Big Sur. Además, necesitarás una copia de Windows 10 u 11, idealmente la versión de 64 bits. Puedes descargarla del sitio web de Microsoft. Asegúrate de que tu Mac tenga al menos 64 GB libres; cuanto más, mejor, porque una vez instalado Windows, necesita espacio para respirar. No olvides que tu macOS debe estar actualizado antes de empezar; todo este proceso puede resultar extraño si usas software antiguo.
Consejo profesional: Es recomendable hacer una copia de seguridad primero, por si acaso algo sale mal. No querrás dañar toda tu configuración por un fallo en la partición o en el controlador. Las Mac tienen una función de copia de seguridad integrada llamada Time Machine; úsala.
Obtener el archivo ISO de Windows — The Download Matter
- Visita la página de descargas de Windows de Microsoft. Elige la versión correcta, preferiblemente Windows 10 u 11, y descarga el archivo ISO. Es un archivo grande que usarás para instalar Windows, así que no uses un código fuente sospechoso. Asegúrate de que sea de 64 bits, ya que Boot Camp no funciona bien con 32 bits.
Es un poco raro, pero a veces el navegador o la configuración de seguridad hacen que la descarga falle o se corrompa, así que revisa bien la ISO antes de empezar. Además, si tienes una conexión lenta, descárgala por la noche; la paciencia es clave.
Asistente de Boot Camp abierto: Hora de particionar
- Abre el Asistente de Boot Camp ; lo encontrarás en /Aplicaciones/Utilidades. Esta herramienta es lo que lo hace todo posible: es la herramienta oculta. Simplemente ábrela y sigue sus instrucciones. Si no la ves, quizás tu macOS no esté actualizado o, por alguna razón, esté oculto. Revisa las actualizaciones o intenta buscarla en Spotlight.
Boot Camp quiere crear un espacio dedicado para Windows en tu disco. Te preguntará cuánto espacio quieres asignarle a Windows. Recuerda que Windows y sus aplicaciones pueden ocupar mucho espacio, así que, si es posible, un mínimo de 50-100 GB. En algunas configuraciones, este paso puede ser problemático si tienes SSD pequeños o una distribución de particiones inusual, así que ten paciencia. A veces es útil ejecutar primero la Utilidad de Discos (ubicada en Aplicaciones > Utilidades ) y comprobar el estado del disco.
Crear la partición e instalar Windows: acción práctica
- Una vez que hayas configurado el tamaño de la partición, Boot Camp te solicitará la ISO de Windows. Si es necesario, conecta la memoria USB con la ISO; algunas Mac la necesitan en una memoria USB para el arranque. No te preocupes si va un poco lento. En las Mac más nuevas con chip T2 o Apple Silicon, la cosa se complica porque Boot Camp no es compatible oficialmente con chips M1/M2; en ese caso, considera herramientas de virtualización como Parallels o VMware Fusion.
- Sigue las instrucciones, haz clic en Instalar y tu Mac se reiniciará con el instalador de Windows. Puede parecer un poco extraño y, a veces, los controladores no se reconocen de inmediato. Cuando el instalador de Windows te lo solicite, selecciona la partición que acabas de crear. El programa de instalación de Windows se formateará e instalará automáticamente. Asegúrate de introducir tu clave de producto o, si aún no la tienes, omítela. Después de un rato, terminará y se reiniciará varias veces.
Atención: en algunas máquinas, el primer arranque de Windows puede resultar lento o extraño, probablemente debido a problemas con los controladores. Conviene acceder al Administrador de dispositivos justo después de la instalación (pulsa Win + Xy selecciona Administrador de dispositivos) y actualizar los controladores si es necesario. Windows suele encargarse de la mayor parte, pero una pequeña limpieza manual ayuda.
Consejos a tener en cuenta al cambiar entre sistemas operativos
- Mantenga su Mac cargada o enchufada: este proceso es más complicado de lo que debería si la batería se agota a mitad de la instalación.
- Asigne suficiente espacio a Windows; si asigna muy poco, se arrepentirá más tarde.
- Recuerda, para cambiar entre macOS y Windows, reinicia la Mac y mantén presionada la Optiontecla durante el arranque. Esto te permitirá elegir qué sistema operativo cargar.
- Tenga a mano su clave de producto de Windows: en algunas configuraciones, Windows no se activará sin ella y tendrá que hacerlo hasta que solucione ese problema.
- Familiarícese con los atajos de teclado de Windows: la transición es extraña y algunos atajos de macOS no funcionan de la misma manera.
Cosas al azar que quizás te preguntes
¿Puedo eliminar Windows por completo más adelante si cambio de opinión?
Sí. Simplemente vuelve a ejecutar el Asistente Boot Camp y selecciona la opción para eliminar Windows; esto deshará la partición. Pero, insisto, primero haz una copia de seguridad; no querrás perder tus datos de macOS accidentalmente.
¿Es posible utilizar una unidad externa para Windows?
Oficialmente, Boot Camp no permite arrancar Windows desde unidades externas. Aunque existen algunos trucos ingeniosos, suelen ser más problemáticos que útiles. Mejor usa tu unidad interna a menos que quieras adentrarte en la tecnología.
¿Debo instalar antivirus en Windows?
Por supuesto. Windows es un objetivo frecuente, así que no te saltes la seguridad. Windows Defender funciona bien, o mejor busca otra opción si eres un poco paranoico.
¿Se puede actualizar Windows en una Mac?
Generalmente sí, igual que con las PC normales. Mantén tu Windows actualizado con Windows Update; es bastante sencillo.
¿Cómo volver a Mac si he iniciado sesión en Windows?
Reinicia tu Mac y mantén presionado Option; luego selecciona macOS en la lista. Así de fácil.
¿Quieres hacer un resumen?
- Comprueba la compatibilidad de tu Mac y prepara tus archivos
- Descargue una ISO de Windows adecuada de Microsoft
- Utilice el Asistente Boot Camp para particionar e iniciar la instalación
- Seleccione el espacio correcto, siga las instrucciones e instale Windows
- Cambie el sistema operativo reiniciando y manteniendo presionadoOption
Resumen y reflexiones finales
Sinceramente, instalar Windows en tu Mac no es tan difícil como parece si prestas atención a los detalles. Es un poco engorroso, y a veces los controladores dan problemas; es un poco molesto, pero se puede manejar. Una vez que todo esté resuelto, tendrás lo mejor de ambos mundos. Si algo falla, reinicia y vuelve a intentarlo; así es la tecnología. Cruzo los dedos para que esto le ahorre un par de horas de dolor de cabeza.