Actualizar Windows 10 es como darle una segunda oportunidad a tu PC. Si va lento, falla o simplemente no funciona, este proceso puede solucionar muchos problemas sin tener que reinstalarlo por completo. Limpia el sistema, elimina la configuración incorrecta y puede eliminar errores molestos de raíz.¿Y lo mejor? Tus archivos personales suelen estar seguros si eliges la opción correcta. Dicho esto, no es magia; algunas aplicaciones y ajustes se borrarán, así que no olvides hacer una copia de seguridad primero. Es como reiniciar el sistema, pero con una red de seguridad.
Cómo actualizar Windows 10
Vaya a Configuración y busque las opciones de recuperación.
Primero, ve al menú Inicio y luego a Configuración (el icono del engranaje).Desde allí, ve a Actualización y seguridad.¿Por qué? Porque Windows guarda las herramientas de recuperación aquí; es donde ocurre la magia. Si tu PC no funciona bien, esta es tu primera opción.
Vaya a Recuperación e inicie el proceso de actualización.
En Actualización y seguridad, haz clic en Recuperación en la barra lateral. Aquí verás opciones para solucionar problemas o restablecer tu PC. Busca el botón » Comenzar» en «Restablecer este PC». A veces, Windows muestra indicaciones sobre cómo conservar archivos o eliminar aplicaciones; selecciona » Conservar mis archivos». De esta forma, tus fotos y documentos estarán seguros, pero el resto de Win10 se limpiará.
Conserve sus archivos y prepárese para la actualización
Una vez que selecciones » Conservar mis archivos», Windows te avisará de lo que está a punto de ocurrir. Haz clic para que se reinicie y comience la limpieza. Sinceramente, en algunas configuraciones es un poco extraño: al principio puede que se bloquee o tarde más de lo esperado, pero con el tiempo se activa. En otras, se completa en unos 20 minutos. Ten paciencia y asegúrate de que tu dispositivo esté encendido durante el proceso.
Consejos para hacerlo más suave
- Copia de seguridad de datos importantes: Sí, siempre. Guarda los archivos clave en un disco externo o en la nube. Porque, claro, Windows tiene que complicarlo más de lo necesario.
- Primero busca actualizaciones: ejecuta Windows Update para instalar los parches más recientes. Esto puede evitar errores extraños después de la actualización.
- Cierra todo: cierra todas las aplicaciones antes de comenzar; esto reduce las posibilidades de corrupción o conflictos.
- Reserva algo de tiempo: No te apresures. Puede tardar entre 20 minutos y una hora, dependiendo del hardware, así que no intentes hacerlo durante una reunión o algo similar.
Preguntas frecuentes: porque todo el mundo las hace
¿Al actualizar se eliminarán mis archivos?
Si seleccionas «Conservar mis archivos», tus archivos personales se conservarán.¿El truco? Perderás las aplicaciones instaladas y la configuración personalizada. Es como una reinstalación limpia con protección.
¿Cuánto tiempo se tarda?
Normalmente, entre 20 y 30 minutos, pero en una máquina lenta o si tienes muchas actualizaciones pendientes, podría tardar más. Recuerda tener paciencia.
¿Necesito una conexión a Internet?
No exactamente, pero ayuda. Las actualizaciones posteriores a la actualización se descargarán más rápido si tienes conexión a internet. Además, algunas partes del restablecimiento podrían extraer archivos o controladores adicionales.
¿Puedo deshacerlo una vez iniciado?
Una vez que Windows inicia el restablecimiento, está prácticamente terminado; no hay botón de deshacer. Por lo tanto, revise sus copias de seguridad y opciones con antelación.
¿Necesitaré reinstalar aplicaciones?
Sí. La actualización borra las aplicaciones instaladas, así que ten a mano los archivos de instalación o los enlaces de descarga. Considéralo un nuevo comienzo, no una reconstrucción completa de tu configuración.
Resumen
- Abrir configuración
- Vaya a Actualización y seguridad
- Seleccionar Recuperación
- Haga clic en Comenzar en Restablecer esta PC
- Seleccione Conservar mis archivos
Resumen
Probar esto suele revitalizar las PC antiguas o lentas. No siempre es necesario, pero si un sistema ha estado funcionando de forma extraña o lenta, es una buena idea, especialmente antes de recurrir a medidas drásticas como borrar controladores o reinstalar todo manualmente. El proceso no es perfecto, pero es sorprendentemente efectivo para soluciones rápidas. Además, es bueno saber cómo hacerlo sin tener que formatear el sistema por completo. Recuerda: siempre haz copias de seguridad; nadie quiere sorpresas.
Ojalá esto le ahorre algunas horas a alguien. No es muy sofisticado, pero funciona en muchas configuraciones. Cruzo los dedos para que esto ayude a que Windows vuelva a funcionar como antes.